A más de 10 años de su comienzo, el Consorcio TOAR ha sido más una buena iniciativa, que un camino para el impulso de la región. Algunas ideas para la reflexión.
A comienzos de los años noventa, los intendentes de nuestras localidades de Azul, Olavarría y Tandil creyeron oportuno iniciar un camino de interrelación entre nuestros municipios con el objetivo de alcanzar entre los tres, lo que no podíamos hacer individualmente. Con el tiempo se sumó a la iniciativa la localidad de Rauch y con esa configuración llegamos hasta hoy.
Más allá de alguna actividad concreta, la iniciativa impulsada por los estados municipales no ha obtenido algún logro trascendente, acorde al sueño planteado en sus comienzos.
Se debe reconocer sí, al desarrollo de la educación universitaria a través de la UNICEN, como una iniciativa exitosa de alcance regional. Las iniciativas de nuestros diarios para editar suplementos es loable. Y con un poco de humor podemos decir también que otra experiencia de integración regional es la Guía Telefónica que incluye el directorio de las localidades del TOAR.
Se suele atribuir a la falta de vocación de algunos intendentes por la regionalización, la causa de su paralización. Pero en este caso dejaremos de lado esa hipótesis pues más allá de ese argumento, hay otras razones superiores que pueden explicar las verdaderas causas.
Como atenuante podemos decir que no hay una sola experiencia de integración regional que haya tenido éxito en la provincia, por lo tanto se puede decir que lo que nos sucede a nosotros les sucede a todos. Esta coincidencia debe ser la que dispare el análisis hacia otras causas que intentaremos describir.
El TOAR abarca un mercado de casi 350.000 habitantes, está ubicado en el corazón de la provincia en una de las geografías más ricas del mundo, tiene una diversidad económica muy vasta, y tres localidades reconocidas a nivel nacional. ¿Por qué entonces no podemos desarrollarnos integrados?
Los obstáculos para la integración se pueden clasificar en: socio-económicos, políticos y administrativos.
Las razones económicas
El TOAR eligió como época para su desarrollo a los años que nos llevaron a la peor decadencia económico, social y política de nuestra historia nacional de la cual recién nos estamos recuperando (actualmente alcanzamos el nivel que la economía tenía en 1998, cuando comenzó la recesión). En ese contexto de administración de pobreza y decadencia, es imposible pensar en lo regional, cuando nuestros esfuerzos debían concentrarse en mantener lo local. En este sentido las crisis también permiten conocer lo mejor y lo peor de cada uno.
Las razones políticas
Como municipios pertenecientes al interior de la provincia de Buenos Aires, desde hace décadas sufrimos una postergación, respecto de los municipios del conourbano bonaerense. Lo sufrimos por un lado en la ausencia de inversión o desinversión en infraestructura (ferrocarril provincial, obras hídricas, carreteras y autopistas, puertos, infraestructura para la industria, infraestructura rural, etc.) y ausencia de políticas para el desarrollo rural e industrial, por citar sólo algunos ejemplos.
Tampoco el gobierno provincial ha demostrado vocación alguna por otorgar a los municipios la autonomía municipal consagrada en la Constitución Nacional de 1994 y vedada en la constitución provincial, también de 1994. Salvo alguna iniciativa de descentralización del cobro de impuestos el gobierno provincial mantiene y consolida el centralismo administrativo.
Cuando leemos trabajos y ensayos acerca de los desarrollos regionales de Europa, no sólo son regiones o distritos autónomos, sino que además están compuestos por municipios autónomos.
Como ciudadanos del interior provincial, la consagración de la autonomía a los municipios es la única medida del gobierno provincial de impacto local que nos debería interesar.
Las razones administrativas
Como experiencia de integración el TOAR es una iniciativa voluntaria, y en algunos casos ha sido voluntarismo local que va contra la corriente provincial.
En el año 2004 en el marco de la formulación del Plan Estratégico de Azul, en el Equipo Técnico que integro, nos tomamos el trabajo de analizar las diferentes regionalizaciones existentes de organismos públicos y privados, provinciales y nacionales a las que pertenece el Partido de Azul.
Así analizamos las regionalizaciones de colegios profesionales, Sección electoral, Banco Provincia, Defensa Civil, Departamento Judicial y Policíal Provincial, Región Sanitaria, Delegación del Ministerio de Trabajo, TOAR, INTA y Ministerio de Desarrollo Humano, entre otras. Logramos confirmar nuestra presunción: a pesar de ser en casi su totalidad dependencias públicas provinciales y nacionales, no había una sola región de las mencionadas que coincidiera con otra.
Más aún, con la salvedad del Departamento Judicial, la única región que incluye en su jurisdicción a los cuatro municipios del TOAR, es el TOAR.